Si quieres ahorrar dinero en tu comunidad de vecinos necesitas un Gestor Energético que te aconseje
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Euroconsult defiende en este estudio la existencia de la figura del gestor energético apoyado por una plataforma de inteligencia artificial que monitorice los resultados en términos energéticos y a la vez económicos, “ya que, de raíz, no se trata de realizar nuevas inversiones, sino de estudiar el comportamiento de la comunidad de propietarios para adecuarla a la realidad energética que demande el inmueble”, apunta.
Si eres un administrador de fincas o bien el presidente de la comunidad de vecinos: ¿Quieres saber cómo gestionar y mantener las instalaciones de tu edificio para llegar al ahorro?
Cuestión de hábitos, gestión y aplicación de la tecnología.
– LOS HÁBITOS DE CONSUMO: la forma más sencilla, y la única gratuita de reducir el gasto es modificar nuestro comportamiento habitual. Por ejemplo, para ventilar las zonas comunes (escaleras, zaguán), es suficiente mantener abiertas 5 minutos al día las ventanas. Cerrarlas durante el invierno es importante ya que de lo contrario nuestras viviendas estarán en contacto con un espacio frío, lo que contribuirá a enfriarlas. Otra buena medida es utilizar el ascensor sólo en caso de necesidad, un cambio que además será beneficioso para nuestra salud.
– LA GESTIÓN: otra forma de conseguir ahorrar, es a través de la buena gestión de las facturas. Un administrador de fincas que se mantenga al día sobre ofertas y descuentos en las contrataciones de luz y gas, y que se ocupe del mantenimiento de las instalaciones, hará que se reduzca el precio de las facturas y que la instalación necesite sólo de pequeñas reparaciones puntuales, evitando así las grandes derramas.
– LA TECNOLOGÍA: finalmente, y no menos importante, es considerar siempre la mejora de las soluciones tecnológicas empleadas en nuestro edificio, o bien la actualización de sistemas e instalaciones.
A continuación te exponemos 5 de las actuaciones más recomendadas:
1.-Principalmente, intervenir en la mejora del aislamiento térmico, que es capaz de reducir la necesidad de calefacción en un 40% en invierno, y de evitar por completo la necesidad de aire acondicionado en verano.
2.-El uso de calefacción central es más eficiente que la individual. En el año 2016 todas las viviendas tendrán que incluir un medidor individual para que cada vivienda pague su consumo independiente del sistema de calefacción utilizado. Existen algunos lugares, como Dinamarca y París, que utilizan un sistema de calefacción urbana, formado por una cabecera que utiliza gas natural, biomasa, geotermia, etc. del cual parten una red de tuberías que llegan hasta una subestación instalada en cada edificio para la gestión individualizada de cada vivienda. Podría decirse que este sistema es parecido a la calefacción central, pero a gran escala. Además, hay que tener en cuenta que en las comunidades donde se utiliza la misma caldera para agua caliente que para calefacción, es conveniente independizar
ambos servicios, instalando una caldera más pequeña exclusiva para ACS, ya que no es necesaria tanta potencia.
3.-Mejorar la positivos de ahorro para las zonas comunes, como detectores de presencia, o temporizadores automáticos para el e iluminación es un factor importante, ya que es el segundo gasto de las comunidades siendo su consumo un 15% del total. Instalar dis
4.-Si existen aseos comunes, por ejemplo en el garaje, instalar pulsadores temporizados tipo flux en los grifos ayudará a evitar goteos.ncendido de las luces, o el cambio de las lámparas convencionales por otras de bajo consumo o led con una mayor vida útil que las convencionales (entre 8 y 25 veces), puede reducir el consumo como mínimo un 40%. Además, sectorizar el encendido por plantas, permitirá encender sólo aquellos puntos de luz que se estén utilizando, y no las demás plantas en las que no hay usuarios.
5.-En el caso de fincas con varios ascensores, instalar mecanismos de maniobra selectiva optimizará el desplazamiento de los ascensores, para que sean más rápidos y eficientes.
La mayoría de éstas medidas no suponen una gran inversión inicial para empezar a obtener ahorros. No obstante, cuando haya disponibilidad de presupuesto, es recomendable acudir a la rehabilitación energética integral del edificio partiendo en base a un Informe de Evaluación del Edificio, dónde se analiza todos estos conceptos para las zonas comunes del edificio. Todo ello con la finalidad de establecer unos criterios dentro de las posibles mejoras de rehabilitación del edificio.